
En un gimnasio, la protección pasiva contra incendios es fundamental para garantizar la seguridad de las personas y la integridad del edificio. El ignifugado de la estructura metálica permite mantener la estabilidad del conjunto durante más tiempo en caso de incendio, evitando colapsos prematuros. Para ello, se emplean productos como morteros ignífugos.

Además, se debe instalar una franja cortafuegos que actúe como barrera entre sectores, limitando la propagación del fuego. Esta franja a de colocarse a una distancia igual o menor a 40 cm de la cumbrera de la nave . Su correcta ejecución es clave para cumplir con la normativa vigente. Todo el sistema debe ser instalado por profesionales especializados y con materiales ensayados.
